Un beso con sabor a eterno,
un abrazo que te haga perdonar,
un sueño porque vivir,
una nostalgia que te quiere derrotar,
agallas para seguir,
intentando sin temer,
vivir sin huir.
Guardar una biografía piadosa,
llegar a viejos sabiamente,
saber no perder el brillo en los ojos,
ni el fuego en el alma.
Caminemos por la vida intentando sentir, intentando no "salvarse". Al final, es lo único que perdurará. Tratando no medir cuán profundamente besar, ni calculando cuánto querer. Que los golpes no endurezcan tu sentir. Que no encuentres las miradas del pasado, en los rostros venideros.
Suerte!