Si, querida Retales. Me encanta, tanto la palabra como la sensación de inicio. Besos
trinar de los pájaros
que no pueden
llevarse en el pico
mis penas
bucólico decir, pero en el final, aparece el cantar de las caracolas, beso grande.
"trinar de los pájaros
que no pueden
llevarse en el pico
mis penas"
Ganas fuertes de deshacerse de ellas, querer que vuelen lejos y que no
vuelvan.
Mucho animo para ti, y aunque digas lo contrario yo creo ver en ti
una persona fuerte que siempre sabe lebantarse del suelo.
Beth:
Amiga de la mirada cuanto dolor y tristeza, me gustaría acariciar tu corazón.
"trinar de los pájaros
que no pueden
llevarse en el pico
mis penas".
Un abrazo fortísimo.
Sergio.
La pena es toda una religión; sentimos deberle todo, debemos deberle todo. Es necesario conocer la pena para saber qué es la felicidad, pero algunos, incluido yo, saboreamos la ridiculez de estar siempre inmersos en las penurias, la felicidad, para este caso, es sólo sentir más pena.
¿Qué cosas, no?
SALUDOS!
PASA POR MIS PENOSOS TEXTOS
Querido gatito perdulario, siento la caricia, que me llega con tus palabras. Abrazos
Me ha llegado esa pena camuflada en el rumor marino de una caracola ...
Precioso, Beth. Siempre llegas a mí.
Me viene un peculiar sentimiento al leer este texto, me imagino con mis pies (o patas) mojandose en el Pacifico... en fin, los laberintos de mi mente son infinitos y misteriosos.
Me gusta tu texto Beth.
Woow!
Muchas gracias, Perrito, y me alegra ser capaz de llegar con mis pobres palabras a que imagines algo
Y llegará la alborada
a quitarte esas penas,
La luz de la mañana
todo lo calma
todo lo quema.
Sé que te gusta la alborada...¿A qué es preciosa?.
Besos Beth.