Espero que no sea Jaime, Sergio, porque en caso contrario, tendría que mirar continuamente a mi espalda, y quizá revisar bien los frenos de mi coche. Saludos cariñosos
Muchas gracias por tus comentarios, Alumine. Norah, siempre es un placer charlar, aunque sea en la distancia y con el océano por medio. Las palabras siguen llegando