Sabes cuantas veces he querido escuchar unas palabras así de quien ha compartido vida conmigo... desafortunadamente no las he escuchado nunca y no sé si las vaya a escuchar, pero te deseo que esos oídos puedan saber discernir lo que nosotros podemos apreciar...
A quien van dedicadas estas palabras tampoco las oirá nunca, porque es imposible escuchar con los oídos cerrados. Pero bueno, cuando la gente se pierde cosas por voluntad propia...será que tiene que ser así. Otro beso para ti