Amanece
la brevedad de luz
finge tu presencia
mi corazón
dice que ya no estas
entre latidos
que se confunden
con la soledad
A placer hurgo
en el armario
del pasado
cumpliendo
la penitencia
que tu adiós dejó
La noche
se aleja
en brusquedad
la despido
dando gritos oscuros
que se funden
al hervor
del primer rayo de sol
Empieza
un día largo
hasta que la luna
regrese y me recuerde
que sigo solo
que el insomnio
llegará
pero tú
jamás
Hace días que no te leía, y te estaba echando de menos Buzz.
Duerme amigo, el día se acerca y el alba te espera calentando la mañana.
Estoy aquí, y te hago compañía.
Un beso.