Liberando cada uno de los apéndices de mi cuerpo, me desato de todos mis instintos que me han traicionado, acoplándome a esta imagen de amargura que desconozco e inevitablemente me acompaña a cado paso que camino, en cada huella que dejo ,en lo superior a mí.
Perdóname, no quise hacer acopio de mi propia lejanía para desencadenar una guerra entre nuestros cuerpos pero te estabas yendo de mi mano, y creí que nunca volverías a mí.
Y desencadeno en ti cada uno de mis anhelos, y cada una de mis propensiones sumamente ridículas. Porque he estado obsesionado contigo en cada momento, y ahora tengo la excusa perfecta para tenerte cerca, mi amor.
No cierres los ojos por favor, me gusta mirarte. Me gusta mucho mirarte.

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1 Comentarios

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  Atalita

  Catherine, que magnifica voz interior que sale a decir lo que siente, Que encantadoras palabras para disculpar un sentimiento de apego, no creo que alguien quiera resistirse. Pensándolo bien creo que el amor no es amor si no viene acompañado de agoismo, celos, dependencia, ansiedad y lo que hoy nos traes obsesión.
  
  Un placer leerte y descubrir tus magníficos escritos

  26/04/12 04:04