Los dedos se aplastan
los ojos se humedecen
las piernas no responden
el cabello se cae
la piel empalidece
la voz no se escucha
el corazón no palpita.
Mientras van pasando los días
los Ayer parecen retratos
de personas ajenas
a las nuestras.
Es un buen poema. Saludos