El CarÁcter de Yolanda
Varias veces por semana acudo al Banco en el que se realizan las operaciones de la empresa donde trabajo, para hacer alguna gestión. Normalmente me suele atender una chica joven, bastante aplicada y muy seria, que tiene por nombre Yolanda. La verdad es que hay que reconocer que es muy mona, con una carita angelical y un cuerpo bien moldeado. Sin embargo, a pesar de no ser grosera, tampoco es muy simpática. Simplemente se dedica a atender a los clientes concentrada exclusivamente en su trabajo, dejando de lado lo que sucede a su alrededor.
El caso es que Yolanda también trabaja ocasionalmente en una administración de loterías, propiedad de sus padres. Normalmente suelo ir un día a la semana a comprar algún boleto para ver si tengo suerte y gano algo de dinero. Pues bien, el otro día llego y me pongo en mi lugar en la fila a esperar mi turno, cuando cual es mi sorpresa veo que Yolanda se encontraba tras el mostrador. Esa misma mañana curiosamente era de esos días en los que había estado en el banco, y lógicamente había hablado con ella. El caso es que tras esperar lo necesario llega el momento en que me toca a mí, y me acerco sonriente hacía la ventanilla de la administración de loterías dispuesto a saludar a Yolanda, con la intención de gastarle alguna broma comentándole su actividad de pluriempleada, cuando ella de forma descarada (aunque posiblemente intentaba ser disimulada) se aparta y deja el sitio a su madre, negándome incluso el saludo y haciendo como que no me había visto. Imagino que se sentía avergonzada de que la viera allí trabajando, después de ser una empleada de banca. El orgullo muchas veces hace que tropecemos delante de nuestras narices.
El caso es que a pesar de sentarme mal no le di más importancia, pues pensé que a fin de cuentas era una niña un tanto estúpida y engreída, y no merecía la pena enfadarse por ello.
Seguí acudiendo al banco y no le comenté nada sobre lo ocurrido, sobre todo para no indagar en su ya herido ego. Bastante daño se hacía ya ella sola pensando así. A la semana siguiente volví a la administración de loterías como siempre, y vi a Yolanda al lado de la ventanilla junto a sus padres, pero un tanto alejada del mostrador. La cara de la muchacha era todo un poema, y a pesar de que normalmente no era la simpatía personificada, en ese momento parecía padecer algún tipo de sufrimiento. Entonces escuché lo que su madre parecía decirle a su padre: - Pues sí marido, ya ves, me duele a mí sólo de verla. Las dos muelas del juicio le ha sacado el dentista. ¡Si me hace a mí lo mismo que a ella caigo de pies al suelo! ¡Tiene que estar la pobre que se muere!
Así que por eso tenía la muchacha tan mala cara, pobrecilla, pensé yo. Llegó mi turno y me puse delante de la ventanilla, y al mirar a Yolanda ésta de pronto sonrío y levantó su mano derecha a media altura doblando todos sus dedos, de forma que me envío un saludo de lo más tierno. Compré mi boleto de lotería y me giré para marcharme, momento que aproveché para mirarle a los ojos, que transmitían sinceridad y afecto. No en vano se despidió de mí de forma lo mar de agradable. Salí del lugar con una sonrisa en mi rostro pensando en qué le había podido pasar a Yolanda, que tan sólo unos días antes se mostraba de piedra, y ahora en cambio parecía lo que era: una persona.
Moraleja: El dolor intenso saca a relucir la humanidad de las personas por muy distantes que éstas sean. Claro que la anestesia también tiene su parte de responsabilidad sobre esa conducta, que es capaz de amansar incluso hasta a los empleados de banca. J
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Mel
Que interesante no??
Es cierto que cuando el dolor te pega fuerte ....te hace dar un giro de 180 grados...
Te hace valorar un monton de cosas...y tmb te hace cambiar en otras....
A mi me paso...muchisimas veces...
Otra cosita...
Acabo de leer tu perfil...y por lo que se ve...te gusta la contabilidad...
Yo tmb estoy estudiando Contadora Publica...aunque con estos 19 a?os no estudie tanto como vos...jajajja
Y mi novio es periodista deportivo...Me qdo definitivamnte con lo contable!!!!! jajajjaja
Es dificil conseguir un buen trabajo de periodista....o al menos en argentina....
Espero q sigas escribiendo!!!
No seas vaguitoooo, como yo...jajaj
Besote!
mel
13/03/09 08:03
