Sentimientos yermos se arrastran
por páramo salpicado de grietas y oquedades
bajo el dominio de la sinrazón
de una acuciante sequía de pensamientos cabales.
La ausencia de ideas y destrezas nos atenaza
y nos encadena al yugo de este seco y polvoriento manto
ignorante de remos y singladuras,
sólo en el haber de navegantes.
Verano,...en exclusiva verano irreverente
ante invierno ausente
adulado por séquito de primavera y otoño
en comparsa insurgente
llevan al estío
el sentir de la gente.
Desde la umbría de mi mazmorra
me refugio bajo la sombra
del taciturno vaivén
de la indolente razón.