Tiene
el tiempo
una onda
De finas
lineas
dibujadas,
Entrelazan
purpura
y oro
Y dejan
charlas
grabadas
Me entretengo
en el lugar
de la aguas,
En donde el río
se hace camino,
y corre,
Al
encuentro
de
tu mirada
No se
humedecen
mis ojos
Ni tampoco
se se llenan
de alma
Pero siento
el calor
en el
cuerpo,
Cuando
en
tu presencia,
Mi esencia
se convierte
En
alas
Por
el camino
te retrato
y te invento
la mirada,
Para que
de esa forma,
Solo con
acercarme, tu
bien sepas
A quien es
al que hablas.