Tremendo
Tremendo
estallido
Con chispas
discurrientes,
Que;
entre tanto
latido,
Mi corazón,
se desentiende,
Pero como justo
enamorado,
Para allá
voy sonriente.
Tengo el alma
empapada,
De tu mirar
crujiente,
Y te
me acercas
en la mañana,
Para mirar
el mar, y
el sol naciente.
Y te me quedas
atrapada,
en mi musica
creciente,
Cuanto amor,
y yo,
de
espaldas
Al soneto
que puede
nombrarla,
Y yo,
como amo
de mi
de mi casa,
Por
la orilla
te llevo
Para que,
Tus pies,
frescos estén,
Sin que
la
orilla,
Tengas que
pisarla.