Tienes el pelo curvado,
como sirena... abrazada
al cuello
de su Fuente,
Tienes las manos despacio...
viajando entre mi frente,
Me quedo en tu nido seguro,
esperando... con ojos
pacientes,
A ese sol
que has pintado,
para
prender despues,
Ese vuelo...
hacia Oriente.