En estos dos años, amor mío,
han ido deslizándose nuestros días
entre vientos impasibles,
llantos placenteros y besos quejumbrosos;
conozco la desnudez de tu lengua,
el calor de tu aliento,
el sabor de tus manos entre mis senos,
la música de tus pasos sobre mi espalda,
el color de tus sueños compartidos,
el poema de tus mentiras,
el dolor en tu aroma;
conozco, el reflejo de tu vida,
porque es también el mío.
Cynthia