Que extraño es observar
mi pequeño tintero vacio,
mirar mis acuarelas medio secas
y los lienzos desteñidos,
que extraño es contemplar
un rio seco,
y las cenizas
de lo que fue un fuego encendido,
y ver este trozo de papel en blanco
y no encontrar de tus versos
ni el suspiro,
que extraño es escuchar silencios,
aun estando rodeado de ruidos,
y buscar un destello de luz
en este manto sombrio,
que extraño es ver que en lo que escribo,
tu ya no estas,
pues ya no estas tampoco dentro mio...
Si eso es as?, tendr?s que buscarte otra musa mi querido Dar?o.
Un abrazo.