Historia de una Vida Contada
por Alguien Sin Escrúpulos.
1.
Sara. Motel. 12:00 pm.
Se acerca al mostrador. El hombre que está allí para atenderla le mira de manera extraña.
―Buenos días, me gustaría reservar una habitación, por favor. A poder ser, la más barata que tengan. ―Dijo Sara con cierta indecisión.
―Mire, señorita, ―Decía el recepcionista mientras le mostraba la pantalla de su antiguo ordenador― tenemos ésta, que sale a unos quince euros la noche y ésta, que sale a unos doce euros la noche.
―Vale, muchas gracias, me quedo con la de doce euros la noche.
―Perfecto, entonces aquí tiene las llaves de su habitación, la doscientos catorce.
Tras haber elegido habitación, Sara instaló las pocas cosas que llevaba. Decidió que como todavía era temprano, podía salir a pasear un rato y ver los alrededores.
Al llegar al vestíbulo, estaba el recepcionista, mirándola otra vez extrañado. Sara hizo caso omiso y salió del motel.
No había mucho que visitar, era un pueblo extremadamente pequeño. Cuando acabó su corto paseo, se paró en un bar a comer.
Ya dentro de su habitación, supo que lo mejor sería investigar aquel motel de arriba a abajo, para no llevarse ninguna sorpresa.