Suspiros recorren con asombro un extraño imaginar que se pierde entre laberintos de lunas de plata.
Una marea de notas ondea el alma que respira entre los reinos donde nace la luz, luego, se llevan la calma serena donde la pasión abraza a la vida.
Voces sin cuerpo de almas inquietas pululan, solo hay que escuchar sin la piel, inmersos en los intrínsecos senderos que vienen desde todos los tiempos.
Respirar los versos de tiempos inmemoriales, en corazones que siguen palpitando en un suspiro viajero sobre el mar de las almas encantadas, sembrando el asombro que habita en el más absoluto de los silencios.
Pareces un medium, divagando entre las sensaciones y andanzas de esos seres que estando aquí, no se ven.
Un saludo muy muy cordial.Un placer leerte siempre compañero Diegozami.