Si me dices que no:
caeré hecho pedazos,
derritiéndome segundo a segundo,
desasiéndoseme el alma en pedazos,
anhelando no seguir más en este mundo.
Si me dices tal vez:
moriré desesperado,
al no tener la fuerza
para reacciona ante cualquier resultado
que te muestre un tanto adversa.
Si me dices que si:
se detendrá mi corazón,
me enviaras en seguida a los sueños,
perderé en instantes la razón,
de emoción moriré ante momentos tan bellos.
Si callas:
creeré que tu respuesta será complaciente,
entonces soñare y seré el hombre más feliz,
y en ves de ver que vas pensare que venís,
(todo esto en el mundo de lo insólito en mi mente).