En el suelo mortesino y generoso donde no hay mas retorno
o en el cielo; cobertizo de miserables y afortunados.
en la primavera que fue mi vida contigo.
o en el invierno glaciar en que se han convertido mis dias.
a donde quiera que este te llevo siempre conmigo, porque vives en mi
en mi memoria y en el ultimo pensamiento antes de dormir; usurpando mis oraciones, alli estas tu...mi pequeño niño azul.
Hay una relación recíproca entre ambos y comprendo a ese niño interno que perdura. Se parece a mí, solo que yo soy otra variedad de azul: índigo.
Besos bella.
