Supe de ti ,dos noches antes que golpearas mi puerta.
la lúz azúl de mi pieza ,fue tu explicación.
fuiste mi regalo azucarado, tierno, afectado.
¿le pregunto al universo, quien te trajo?.

Entrelazamos nuestras manos en el cuarto de un loco.
regaste mi boca con tu encanto.
conocí tu delicadeza y sus razones.
no hablabas.
yo acariciaba tus silencios.

Estuviste sobre mí y aún no te bajo.

Te fuiste por la mañana.
fue un error haber dormido.
no alcancé a decirte lo hermosa que te ves ,bebiendo directamente desde el jarro.

Me entretuve arrojando naranjas por las calles de la ciudad.
fui incapáz de interpretar mis propias señas,
confundiendo el fuego con la lúz.

Agradezco tu visita.
mi reclamo es a la brevedad,
a lo inexacto,
y a mi torpeza.

Quisiste amar a quien no sabe, y retribuye con una daga.

Sigo soñando contigo.
a veces estas vestida.
agitada, voraz...
en tu patio veo una bicicleta roja,
me acompaña mi padre muerto,
se encienden las luces de tu casa,
yo sigo descalzo en la vereda.

Celoso estoy de mi chaleco negro.
rabioso, pues sabe mirarte.
yo se que el roza tu risa,
celoso porque se que lo abrazaste.

Se acercan los días del otoño.
– prefiero perderte a compartirte.-


Las ratas me asustan,
el puente ya no existe,
la vela es un recuerdo.

Apareces en el centro de mis mándalas.
te enojaste la última vez que dije :tu estas en todas partes.
en ti hay colores que jamás conoceré...

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