Ahora que la brújula señala inderogable el sur inderogable
yo me alegro y canto una canción más hermosa que el llanto.
Nos habían robado la luna en una noche oscura
hasta que inventamos el sol y amaneció.
Esta es la tierra fecunda de los desaparecidos
Esta es la patria de la humanidad que lucha
Esta es la mesa donde se sientan a comer manjares
Luther King, Mahatma Gandhi y Carlos Marx.
Era cierto. Cortaron todas las flores, y nos duele.
Pero era cierto. No pudieron impedir la primavera.
Ahora la brújula señala al sur
y tú
amigo norteño
¿qué esperas para agacharte?
tan alto no puedo ayudarte
tan alto no puedo
darte un abrazo
¿qué esperas? ¿qué esperas para agacharte?
Ahora la brújula señala al sur
con su corazón de acero, con su voz de fuego
canta conmigo, hermano norteño, la canción más hermosa que el llanto.
Veremos florecer la rosa de oro
en el mismo lugar donde sembraron el veneno.
No lo olvides, el triunfo humano, es inexorable. El sur clama y calma
y ya se divisa clara, la alegría de la mañana.