Es la historia de una niña que se convirtió en mujer demasiado rápido.
Es la historia de su agonía, su vuelta a la vida, de su recaída y su resurgir de las cenizas.
Es la historia de Kelly y Kelly puedes ser tú, puedo ser yo.
Puede ser tu amigo, quizás tu vecino. Y si no es lo mismo, algo parecido.
Es la historia de una niña perdida que buscaba en su vida algo que se pareciese a la alegría.
Pero cayó en el vacío y creyó que todo estaba perdido.
Jugaba a las muñecas para olvidar sus penas hasta que encontró a los chicos tan por ella queridos.
Y buscó más, pero no encontró jamás.
Se puso en juego para vencer el miedo.
Se adentró en la tormenta, una realidad violenta.
Se hizo daño hasta subir un peldaño tras el desengaño.
Vió más allá y se lanzó para descubrir la verdad.
Jugaba con ventaja porque abriera la caja de la experiencia falta de cadencia que le arrebató su dulce inocencia.
Se entretenía mientras de frío se estremecía y el fuego ardía.
Entró en la aventura del Poder y comenzó a arder.
Mientras se quemaba, algo se apagaba.
Es que ella luchaba y se volvió fuerte y fría.
Seguía perdida en su camino, pero un día encontró el sentido y venció lo temido.
La tempestad cesaba al solo caminar y construír su hogar, al luchar, al esperar, al Amar.
La soluci?n a todos nuestros males, siempre es el Amor.
Un Bien tan escaso.