I
Yo te digo que nos queda tanta vida amor,
Tanta vida.
Nos quedan tantos soles
Y estamos preocupados por banalidades.
Vos me decís que ya no llore
Que puedo esconderme en los pliegues de tu pecho
Que no me vas a defraudar,
Y sigo teniendo tanto miedo.
Yo te digo que a veces no entiendo,
Como me decis tantas cosas en tan poco tiempo,
No esperan tantas lunas
Tantas noches.
Nos quedan infinitas noches, amor.
II
Yo te digo que estamos hechos de estrellas,
Del polvo de infinitas estrellas
Y vos no me crees
Vos me decis que cada vez
que respiramos profundo, renovamos
una parte del alma
y claro que no te creo
Yo te digo que en el mar
las cosas se ven mucho mas claras
y vos no me crees
Vos me decís que el fuego del sol no quema
pero un día va a dejar de brillar
y me río pero no te creo.
Y pareciera que no creemos, ni una sola
de las palabras que se lleva el viento,
las palabras que necesitamos decirnos,
para no sentirnos tan infimos
dos lucecitas que gravitan juntas
entre tanta inmensidad.
III
Yo te digo que no llores
si algún día me ves partir,
porque siempre las partidas son necesarias,
y me apretas las mejillas y sonreís.
Vos me decís que el tiempo es circular,
que es pura mentira lo de las horas,
que el tiempo es un ida y vuelta constante,
plagado de repeticiones, a lo largo de la historia
yo te miro y te admiro, y me siento distante
yo te digo que algún día seremos polvo
algún día dejaremos el mundo,
y echaremos a volar
me recordas que para vos no existen los días
vos me decís que no me inquiete,
si los tiempos nos separan,
que no me inquiete y que recuerde mis palabras
tenemos tanta vida amor
Y no entiendo como, pero te creo,
Te creo firmemente, como si fuese cierto
Te creo y lloro,
Por mas que los días no existan
De seguro en algún momento te voy a extrañar.
