El papel es intrínseco a morir había señalado quien les habla al director del diario, desde mi punto de vista con aguda percepción (Nótese que no busco notoriedad, sino perspicacia a la hora de convencer a la gente).
Todos morimos Francis replicó sutil quien tomó la posta en esta conversación. Aparte, no vendemos papel, sino ideas.
Verdaderamente interesante, el hecho que su mercancía tenga dos muertes después de consumirse es sin duda una conclusión devastadora, en cierto punto: ¿no le da lastima que muera? apunté.
¿El papel, la gente o las ideas? Es muy irónico cuando quiere.
Da lo mismo, desde esta vista deslumbrante (se veía el mar desde el piso catorce), todos se ven chiquitos.
Es verdad, todos y cada uno de ellos. Sin embargo (gesticulando con las manos, (muy falso)), nosotros trabajamos de esto, vivimos continuamente el dolor de los demás, no creas que soy un insensible. Ironías aparte, me estaba dando la nota de despedido.
Me lo merecía. (En cierto punto). Me mandó a cubrir la guerra allá cerca de Rusia (No, no recuerdo bien el nombre adonde me había mandado) y como me tenía que bajar en Europa y luego ir allí, (¿quien sabe como?), tuve la fantástica idea de ver todo desde Italia.
Al fin y al cabo estamos a mano. Yo había tenido un buen maestro.
Cerró el sobre y dijo:
Váyase Francis
Adiós señor, hasta la próxima noticia.