No sé qué hacer para mantenerte a raya
vienes y vas cada vez que quieres
escribo tu nombre en la arena de una playa
y las olas te borran pero mi mente te adhiere.
No quiero permanecer en la penumbra de tu aurora
no quiero sucumbir a tus sutiles encantos
dime qué hago con el pasar de las horas
si cada vez que miro veo tu retrato.
Me despierto y veo en medio de la noche
cómo te vas colando entre mis brazos
cierro los ojos y me abotono el broche
que mi corazón ha dejado abierto por tu paso.