Hoy es de noche, pero ¿no era la tarde?
¿En qué hora descargó su furia incoherente esa arma ciega, extraviada?
Ahora recuerdo
un caco rotoso, gorrita en reversa, la remera rota
sucia como su cara desorientada, aterradora y zombi,
ya perdida para siempre como sus caóticas manos sin ley.
El propósito: Incierto y descabellado
Tal vez deseaba morir él,
pero lo asustaba el sueño de un infierno peor.
Eligió mi noche, noche de tantos.
Noche por sorpresa, noche de llanto.
Llanto de los otros que esperan en casa,
por un rostro amigo, un padre querido,
un hijo feliz, una hermana, un marido.
¡Por qué no querría abrazar la muerte él!
Maldito cobarde oligofrénico Kirchneriano.
¿Sentirá que ayuda así a su reina asesina,
a su diosa mezquina en sacrificio pagano?
El nada teme porque llegarán pronto
sus demonios protectores, deformes morales,
los satisfechos jueces que darán bendición
a su perverso ser y a su derecho innato
de salvaje bestia, para esquivar las leyes
de imbéciles mortales
que tristes se alejan camino a la oscuridad
practicando ciegamente una danza butóh,
en su afán por recobrar sus cuerpos robados.
Soy argentina como vos...y soy una ciudadana, si vos te sentis un súbdito, lo lamento mucho.