Negra sombra me arropa con un manto de familiaridad que me satura pero no sé como librarme, perdido en un abismo de pesadas dudas, hundido en el espesor de miedos que parecen insuperables.
Asi suceden las horas, y buscando una salida, un rayo de luz que indique el camino la noche me sorprende, a solas con mis demonios y mis ojos se cierran a mi pesar, sumergiendome en un mundo de sueños del que a veces no quiero retornar.
Negra sombra, amiga cruel que no me dejas ni un respiro, apartate de mi camino, quizás alguna vez seas tú quien pruebe el amargo sabor de la derrota y sea yo quien por una vez, ria el último.