La sangre está vedada
de derramarse en estas colinas y páramos:
Sólo pueden ser anegados por lluvias
o intensas hidrataciones de nieve.
Las flores son de paz y son calmas
y el viento una marea que las pule.
Las aves son sostenidas migraciones
que traen inciensos del levante.
Por este lugar pacífico andaremos
hasta que crezcamos lejos de los triciclos
y sepamos escoger entre el bien y el mal
dejándonos arrastrar por los amores.
El querer aquí se abre en botones
y se extiende en haces de reflejos:
Este lugar es para los guardados
que son naciones que nadie más mitiga.
Mientras el resto del mundo juega a las guerras
aquí velamos por la perpetua calma
Gracias SOLOALMA, un gran abrazo!