La noche quiere apagar de Tambú tu sonrisa Xhosa,
Pero ella se niega en dolores de males trasformar.
En la selva de tu moreno y tan reconocido rostro,
Quiere seguir viviendo amplia y en su ganada libertad.
Alzaste la voz en aquellos lúgubres días sombríos,
Detrás de los barrotes, tus palabras se hicieron escuchar.
La sabana del Congo se cubría de llanto y terribles alaridos,
El león blanco devoraba su presa sin tener ninguna piedad.
Alzaste en tus manos cautivas, banderas flameantes de justicia,
Veintisiete años encarcelados, hicieron rugir fuerte al Jaguar.
Un pueblo marcho al llamado de tu sentido y valeroso rugido,
Pretoria empezaba a entonar himnos francos y marciales de libertad.
.- EL reino de los muertos hoy atento te sigue ansioso esperando,
El carro de fuego se alista para venirte a la gran historia a llevar.
Sentiremos seguro un profundo dolor al ver posible tu vida perdida,
Pero ganaremos un emblema perpetuo, un estandarte de pasividad.
.-¡Viva Mandela!, que el grito fratricida pudiera en la paz llegar a callar,
Hoy en la selva el león blanco y la pantera negra pueden cohabitar en paz
Descansa Mandela, que la historia espera que ocupes ese laureado lugar
Junto a Don Quijote de la mancha, ambos supieron conseguir un ideal
