El tiempo no existe.
Es sólo el miedo de quienes no sabemos olvidar.
…y éste temblor que no acaba…
Que el mar se monte sobre las ciudades,
Que el futuro se detenga,
Como se detiene mi sangre;
Uno, dos;
Y que las tempestades se caigan entre las personas,
¡Que venga ya!
Psicosis; ¡que venga ya, que no quiero verle!
Cielos; no, no, ayuda…
Todo…
Nada…
¿Sigues ahí?
No puedo verte…
¿Juegas?, ven junto a mí…
Hay silencio, derrotas y traición;
¡Es que no puedo!
¿Quieres?...
Te daré…
¡Toma!...
Es lo que me diste…
Toma de él…
No…
Si…
¿Sangre en el piso?... ¡eres tú!
Abre los ojos…por favor…
¿Sigues ahí?
Respira el veneno…
Y que las ciudades se monten sobre el mar,
¡Y que detenerse sea el futuro,
Que no quiero ver!
Tres, cuatro…
Cuenta tu nombre…
Ahí estoy yo…
¿Puedes ver?
Te vivo; tu edad; te consumo; cuenta hoy…
Aún sigo ahí…
No temas, acércate.
Noches muertas sepultan a mis ojos.
No, ¡que venga!
Y que los cielos se tornen obscuros,
Y que lluevan culpas…
¿Me abandonas?
Nunca aprenderás…
No podrás…
Ahí estaré yo, tomándote cada vez que lo desee…
¡Te arrepentirás!
Recorreré tu lejanía envuelto en sombras,
Y te llevaré al infierno.
¡Dame más!
…y que la obscuridad sean los cielos,
Y que la culpa sea la lluvia;
Cinco…
¡No te vayas!
¿Indiferencia?
Te ayudaré…
Fíjate bien…
No vivas, no respires.
No mueras, no dejes de respirar.
¿Lo sientes?
Me fumo tu alma…
¡Y que venga el fin!
Seis…
Johnny Hoyer.
buen texto, te gusta el metal?
pero de todas formas es muy bueno, un saludos amigo...