Tú que me embriagas con tus ojos
Aun que sean de hostilidad
Tú que denotas impaciencia
Un flirteo decoroso, y retocada vanidad.
No me hagas pensar que tengo alas
Y que por el valle de tu amor puedo volar
Aquellos que volamos podemos sentir
Aquellos que volamos podemos amar
Esas alas que yo hablo otra ave han de adornar
O tal vez todavía no has dado cuenta
Que me colma la impaciencia
Por estar en su lugar
Tal vez mi plumaje no sea de admirar
ni mi canto entone la mejor melodia
pero algo si te he de asegurar
que yo te amare de noche y de dia
Por que si miras a tu lado ahí estaré
Emprendiendo el mismo viaje irrespondido
Manteniéndome en la inopia de tu ser
Conociendo un lugar desconocido
Ignorando lo que otro ha de saber
Tal vez tu vendrás a mi nido
El día que las hojas se caigan
O el día que las rosas florezcan
Y esperare
Y si al final de mi aguardar no llegas
Quiero decirte que tristemente he aprendido a volar
Por que
Aquellos que volamos podemos sentir
Aquellos que volamos podemos amar
Si con volar te refieres a soñar, toda la razón te he de dar. Tu poema tiene muy buen ritmo.