Dos rosas encarnaban una danza definida,
pintorescas al son de los cantos,
de los cantos el pajaro anida.
Tersos los petalos que adoptan la espina,
que depura la rosa bachata,
lo astilloso de su hoja fina.
Floreces sin macula desvirtuando placeres
brillando serena y paciente,
de espinas y rosas tu eres.