Sueña, me dijo el genio,
y te concederé tres deseos.
Él retornó a su botella,
yo me empapé de mi anhelo.

Sueña, me susurró,
en cierta ocasión, el hada.
De tanto soñar despierto,
el sueño fuese, y no hubo nada.

Sueña, propuso el duende.
A soñar me invitó el mago.
Y entre mitos y quimeras,
viví en un sueño, soñando.

Forja tus propios sueños,
me aconsejaba mi padre.
Olvida aquellos castillos
que se esfuman en el aire.

Huye de charlatanes
y vendedores de sueños.
Que los sueños no se compran,
se persiguen con empeño.

Sus palabras se cosieron
a la piel de mis recuerdos,
como amarras que sujetan
cada roto de mis sueños.

Y olvidándome de genios,
de duendes, hadas y magos;
corrí detrás de mis sueños
hasta lograr alcanzarlos.

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5 Comentarios

• 

  Violeta

  Me gustó!
  Un saludo!

  14/12/15 11:12

• 

  Jucapega1963

  Me alegra que te gustara. Gracias Violeta. Un saludo.

  15/12/15 11:12

• 

  Avelibre

  ¡Precioso!
  
  Yo prefiero equilibrar la realidad con las quimeras.
  Demasiado de una sola cosa termina por agobiarme.
  Lo importante es conseguir alcanzar los sueños.Me alegra por ti que lo hayas conseguido.
  
  Saludos

  19/12/15 06:12

• 

  Jucapega1963

  Por supuesto que es importante conseguir los sueños, Avelibre. Yo sigo corriendo detrás de los míos. Gracias por tu comentario y mis mejores deseos para ti.
  
  Saludos.

  23/12/15 06:12

• 

  Oliviaferrer

  Precioso este poema, pero preciosos también los textos que hablan sobre lo injusto que es este mundo.
  ¡Qué grandes son algunos!

  31/08/17 02:08