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Vengo a Pedir tu Mano...

Vengo a pedir tu mano…
Tu brazo, tu antebrazo;
Tus hombros y tu espalda.

Tu boca, tus labios
tú diente descalcificado
y tu nariz achatada

Tus pechos bien escondidos,
el corazón al que dan abrigo,
Aunque lo hayan hecho pedazos.


Tu cabello necio,
tu cuello, tu cara
tu cutis reseco
bien seco como el Sahara.

Tus ojos y su brillo;
tus pestañas y sus lagañas
tu vientre y ese ombligo
que está en tu libro
de lo que más extrañas.

Tus tobillos tus pasos,
tus dedos, tus uñas enterradas.
Tu espalda, tu espinazo,
tus costillas, tu exceso de grasa.



También tu olor a rosas
Y el repelente de tus axilas.
Bisagras sudorosas,
peludas como las mías.


Tu complejo de “chamorros flacos”
tú autoestima cambiante
como los días en febrero y marzo:
feliz hoy, mañana no se sabe

Tus antojos de chatarra
Cundo deberías estar durmiendo.
Tus maldiciones en la mañana
al entrevistarte con el espejo.


Vengo, aunque no quieras
por tu cintura y su acta de defunción,
Por tus grandes caderas
Triunfantes en la guerra contra el pantalón.

Vengo por tu nuca y tu espalda
y eso con lo que te sientas;
aunque no haya mucha abundancia
y no se distinga dónde empieza.

Solo quisiera llevarte a mi casa
Pero si quieres salir de la iglesia
Aunque venda mi vaca
Te visto de blanco y ¡que así sea!

Vengo a pedir tu risa,
Tu alegría,
tu desconsuelo,
Tu necedad y tu iniciativa,

Tus acciones;
tus errores, tus aciertos.
Tus virtudes, tus defectos.

Tu seguridad y tus dudas
Tus derrotas, tus proezas.
Tu ingenuidad pulcra;
Tu “ya que” cuando la riegas.


Quiero alargar el amor por ratos.
Ya no quiero regresarte a tu casa
porque al cerrar tu puerta ya te extraño.

Vengo a pedir tu mano……
Para agarrar tu mano
Tu brazo, tu antebrazo;
Tus hombros, tu espalda.

Tus pechos bien escondidos
Tu cabellera y su brillo
También tu difunta cintura,
y todo eso que ya se dijo.

Todo eso que se ve por donde vas
Y también lo que está en tu cabeza
eso el la otra mitad
que también merece otras letras.

Vengo a llevarme todo:
la anatomía de tus ideas
y de tu cuerpo.

Para tu corazón roto,
el amor es panacea,
es el mejor pegamento.
Kalel11 de diciembre de 2023

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