TusTextos

Cinco Minutos

Cuando quisimos intervenir ya era tarde; el becerro de oro había deslumbrado a mi amigo con sus destellos cegadores hasta anular por completo su voluntad. De nada sirvieron nuestros argumentos, las súplicas, y hasta los numerosos y desagradables enfados provocados por su insensatez; la tentación de ganar dinero fácil, representada en aquella imagen del joven elegante y atractivo apoyado en un flamante BMW descapotable, contemplada a diario en diferentes soportes, le había atrapado tanto como su mensaje: “Hoy he ganado 900,00 euros en cinco minutos desde el ordenador de mi casa”. Era como si aquel hombre dinámico y triunfador de sonrisa perfecta se burlara de todos los asalariados y especialmente de él, pequeño empresario cansado de tanto madrugar: “No seas imbécil, ¿porqué estar todo el mes trabajando en un supermercado por novecientos míseros euros?, cuando puedes ganarlos desde el ordenador en cinco minutos, como yo...”

Vendió su negocio –que en realidad pertenecía al banco– y siguiendo un plan perfectamente trazado comenzó a familiarizarse con los simuladores online de inversión en bolsa que abundan en la red. Los éxitos no tardaron en llegar; dinero fácil, instantáneo, en apariencia inagotable, al alcance de los más osados, como él. Pero estos simuladores parecen mostrar su cara más amable cuando los utilizas con dinero de juguete, y la más despiadada cuando atrapado por la codicia ofrendas al becerro dorado todos los dígitos de tu cuenta corriente; la real. Se acabó el juego.

Vino a visitarme en alguna ocasión al comienzo de su aventura. Me habló de una vida nueva “Solo trabajo media hora al día” “creo que ya le tengo pillado el truco para ganar sobre los mil pavos cada dos o tres días” “ He tenido pérdidas y ganancias, pero el balance es bueno”
Después dejamos de tener contacto durante unos meses.

La llamada de auxilio de su mujer fue la culminación de un mal presagio: “Por favor, habla con él, nos ha arruinado a todos, a sus padres también” “Ha perdido ciento treinta mil euros que además no eran suyos, los debe al banco” “Me da miedo que pueda hacer una locura...”

No, la locura ya estaba consumada; ahora llega el momento de afrontar sus consecuencias y buscar soluciones, si es que existen.
Ayer bebí y lloré con él, como en los viejos tiempos, mucho más felices que los actuales y menos comprometidos. Le dije que yo le perdonaba y al principio no lo entendió, pero unas copas después me agradeció que en esos momentos tan amargos alguien le ofreciera un sentimiento diferente al rechazo.
Sí, yo te perdono, amigo mío, pero, ¿podrás hacerlo tú?

Sobre la barra del bar, un manoseado periódico deportivo mostraba el anuncio de un supuesto piloto de aerolíneas que sujetaba un abanico de billetes grandes mientras sonreía; ganados cómodamente desde una playa paradisíaca con un ordenador portátil, en cinco minutos...



Laredaccion23 de mayo de 2012

18 Comentarios

  • Buitrago

    Tremendo, pero como digo siempre, no se nos engaña, nos dejamos engañar... un gusto volver a leerte amigo esteban
    abrazo cordial señor

    Antonio

    23/05/12 09:05

  • Laredacción

    Así es, amigo Antonio. En el siglo XXI todavía se da el timo de la estampita.
    Un gusto también ver tus comentarios.
    Un abrazo.

    23/05/12 10:05

  • Laredacción

    Pues sí, mi niña, ojala este escrito sea leído por alguien del foro con la misma tentación que mi amigo, y le haga recapacitar.

    Muchas gracias por tu comentario sobre los aspectos literarios; siempre es un placer contar con tu opinión, y más si es tan generosa...jeje

    Un abrazo fuerte con besos.

    23/05/12 11:05

  • Danae

    Mi abuelo materno, un Séneca andaluz de tronío, decía: "Nadie da un duro por dos pesetas".
    Hay quien lleva en su carácter ese amor al riesgo, que para los negocios es bueno y necesario. Pero si no se basa en algún esfuerzo personal (cuanto menos), sino en ese dinero que parece que llueve sin untarse las manos y saber ni de donde viene, es todo un timo.
    Me ha gustado leer este texto, por lo demas perfectamente estructurado como es habitual en ti, porque es un buen aviso para los incautos. Yo tengo una amiga que ... Bueno, no le ha pasado igual, pero algo muy parecido, aunque sin llegar a esos extremos tan dramáticos.
    Un enorme abrazo.

    23/05/12 03:05

  • Nemo

    Que tal!!... Que bien que andes por aquí.
    Como adicción, peligrosa al no poder detener ese espiral.
    La forma en que nos inmiscúes en la historia es lo que más me gusta de tu trabajo.
    Un abrazo Esteban!

    23/05/12 10:05

  • Indigo

    Los argumentos expuestos de manera clara y amena, imagino que son más que convincentes por si todavía hay incautos que dócilmente buscan las maneras de acrecentar sus ingresos fácilmente con esas argucias deslumbrantes que revelas.
    Como dice un amigo conocedor en informática: “Nada en Internet es gratis”.
    Como un ejemplo concreto, en el lateral derecho del cándido@hotmail.com/ es frecuente ver estas viles ofertas y lo peor de la agresión al trabajo decente; dirigidas a la mujer.

    Gran saludo Esteban.

    24/05/12 03:05

  • Libelle

    Me da mucha alegria volver a leerte saludos amigo

    24/05/12 10:05

  • Laredacción

    DANAE
    Que "nadie da duros a dos pesetas" también lo decía también mucho mi madre; y es una clara muestra de la sabiduría popular, que desgraciadamente no todos poseen.
    Gracias por pasar por mi rincón y dejar tu opinión, un gran placer, poeta.
    Un beso fuerte.

    24/05/12 07:05

  • Laredacción

    ¡HOLA NEMO!, para mí también es una gran alegría saber de ti.
    Gracias por tus palabras.
    Un fuerte abrazo.

    24/05/12 07:05

  • Laredacción

    INDIGO
    Sí, amigo, estos anzuelos para incautos están por todas partes; también son parte de la publicidad de Tustextos, yo estoy harto de verlos, especialmente después de lo ocurrido en mi círculo cercano.
    Ojala sirva para que la gente se lo piense quinientas veces antes de rendirse al becerro de oro.
    Muchas gracias por tu visita y acertada opinión.
    Un abrazo.

    24/05/12 07:05

  • Laredacción

    LIBELLE
    ¡Hola, guapa!, ya sabes que el placer de vernos por aquí es mutuo.
    Besazo.

    24/05/12 07:05

  • Gabrielma

    Menuda paradoja, me gustó la manera de redactarla y los tempos mostrados en el relato.

    Un abrazo.

    24/05/12 11:05

  • Martingioti

    ... "po cí", como dicen por estos lares...
    Una buena crónica periodística...
    Disculpamé, pero nada más leer el título, sin haber empezado aún leer más, empecé a cantar: "la vida es etéeerna en 5 minutos... " Victor Jara... lo tenía olvidao al pobre.
    ... "po ná", espero continuar leyéndote... bien venido y bien hallada... que floja que soy... Besos

    11/06/12 10:06

  • Laredacción

    GABRIEL
    Celebro que te guste, amigo.
    Un abrazo.

    MARTINGOITI
    Ayyy...ese Victor Jara. Qué recuerdos,¿verdad?
    Pues sí, bienvenidos/hallados jejeje
    Un beso.

    11/06/12 02:06

  • Flacco

    Hola Esteban:
    Pues los trucos más viejos del mundo siguen funcionando. La naturaleza humana en dos de sus múltiples facetas: el que engaña y el engañado. Pásate por mi sitio y hay un cuento parecido "Martín Huarache".
    Saludos amigo

    18/06/12 01:06

  • Laredacción

    FLACCO
    Qué alegría verte por aquí, amigo.
    Es cierto, mucha gente se sigue dejando engañar absurdamente. Los malos tiempo actuales también invitan a ello.
    Pasaré a leer tu "Martín Huareche"
    Un abrazo.

    23/06/12 12:06

  • Jandri

    ¡¡¡Jooo. tío!!! Después de tanto tiempo y me encuentro con esto... Un poema de lo absurdo de nuestra naturaleza. Duro, muy real y mejor escrito no podía estar. Eres un especialista en crear sentimientos y estamparlos contra el papel para provocar al lector. Sabes que tienes esa capacidad, no dejes tanto tiempo sin "provocarnos" ... lo necesitamos.
    Besote Malandrín... ¡¡¡Hola, Martingoiti!!!

    28/06/12 09:06

  • Laredacción

    ¡Cuánto tiempo, Jandri!, ya echaba yo de menos tu imagen desértica y tus bonitos comentarios.
    Un abrazo fuerte

    29/06/12 11:06

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