En el fondo, eso de no luchar por nada no es tan malo. Piénsalo. Si luchas por algo, pones ilusión en conseguirlo, y toda tu felicidad en ello, más de la mitad de las veces saldrá mal. Porque es así, los que no se esfuerzan en conseguirlo, lo consiguen. Los que ponen su empeño, fracasan.
Todos sabemos que si no tienes nada, al menos no tenemos nada que perder. Si estás vacía no tienes nada más que vacíar. En este caso solo puedes llenarte.
Que sí, que todos tenemos que tener sueños y luchar por ellos y tal. Pero cuando os ilusionéis, y venga alguien que no lleve ni dos días intentándolo y lo consiga, veréis como tengo razón. Veréis como eso de no tener nada, al fin y al cabo, no es tan malo. Al revés, es bueno. Porque, ya llegará el día en el que alguien venga y te llene pero, mientras tanto, seguiré con mis ideas, mi manera de sentir y mi manera de ser.
