Capitulo 4: Ese Gato Negro de
Ojos Amarillos
El bullicio en el patio era señal de que el recreo había comenzado, quizás el zumbido en sus oídos fruto de los nervios no dejo que escuchara el timbre, pero en ese momento cuando intentaba recuperar la calma mientras estaba sentada en un banco fuera del aula no pensaba en si realmente sonó o no. En eso una muchacha de falda corta se le acerco.
-¿Giselle? Te sientes mal? Tienes la cara pálida-dijo María-
Giselle parpadeo un par de veces como si la luz del radiante e insoportable sol la hubiera segado y es que a la pequeña figura de su amiga la veía sumamente borrosa hasta que paso los puños sobre sus ojos refregándoselos, entonces pudo verla claramente, ella traía un rostro preocupado y al mismo tiempo confundido como si fuera a decir “No te ves bien ¿Tienes hambre? ¿Quieres comer algo?”, conociendo a María seguro estaba pensando algo así, recordando eso le sonrió.
-Estoy bien…solo estoy un poco sorprendida-le respondió-
-¿Sorprendida?-dudo-ha ¿puede ser por el chico nuevo?
- Si él es…extraño…
-¿Extraño? Más bien lindo diría yo…-Afirmo con las mejillas levemente sonrojadas-
Giselle se recostó en el respaldo de la silla y llevo su mirada al cielo forzando a su memoria para que trajera los recuerdos del sueño en el que vio al chico de cabellos rojizos. Por mas que lo pensaba y lo repensaba no podía asociarlo con algún otro que no sea ese que entro por la puerta del aula, pero si realmente era el ¿Por qué había aparecido en sus sueños? además de esa manera tan extraña y junto a Melisa, ¿Quién era? Se pregunto y entonces recordó que se había presentado con un nombre…pero no lograba traerlo a su mente.
-María…-llamo a su distraída amiga que parecía estar perdida mirando algo o alguien-
-He! ¿Que?-reacciono nerviosamente-
-Ese chico…el nuevo ¿Cuál es su nombre?
-Este…si mal no recuerdo Ana averiguo que se llama Lucas…
-Lucas? …mmm…-trataba de aclarar los diálogos que daban vueltas en su cabeza pero por alguna razón no encontraba lo que buscaba- haa!!-grito con furia-¿Por qué diablos no puedo recordarlo?
“Ho! Maldita sea…se me escapo” pensó y dirigió sus ojos hacia María que la miraba estupefacta, entonces le sonrió…
-Bien, bien…la verdad estaba muy preocupada, anoche estudie mucho y ahora no recuerdo nada haa!! Es tan frustrante-grito nuevamente pero esta vez en un tono mas sumiso y con menos ira.
-Giselle… ¿Por qué siempre…-trato de decir mientras ponía una cara triste pero casi de inmediato cambio a un gesto alarmado-espera! ¿Estudiar? ¿Para que?
-Hoy tenemos examen de Conocimientos previos…-respondió felizmente-
-¿Qu-que!!!? ¿Cómo puedes decir eso tan tranquilamente? Yo no tenia ni idea… ¿y ahora que voy a hacer?-
El sonido del timbre callo los gritos de María trayéndole alivio a la irritada Giselle que se levanto y corrió al aula tratando de encontrar algo de silencio pero fue imposible…
En una esquina estaban todas sus compañeras reunidas alrededor de Ana y Lizet haciendo un festival de murmullos.
-¿Qué sucede?-pregunto aparentando interés-
Lizet dirigió su filosa mirada hacia ella y Ana la tomo del brazo jalándola con fuerza.
-Giselle…-dijeron en uno tono molesto-Que…
-¿Qu-que?-balbuceo asustada-
-Que…que envidia!-gritaron las dos a coro-
-D-de que están hablando?-pregunto mientras se quitaba a Ana de encima-
-Lucas…vive en tu barrio…-afirmo Lizet con un gesto decepcionado-
-¿En mi barrio?-dudo-pero si no había ninguna casa…ho!- reacciono acordándose de algo- Era el entonces!
-¿era el?
-Si! Recuerdas que tenia nuevos vecinos que aun no sabia quienes eran?
-Ha! Los que se mudaron a esa casa que tanto te gusta…
-Así que eran el y su familia ¡que sorpresa!-pronuncio con falso entusiasmo-
-Pues si…aunque nadie se atreve a hablarle aun…
-¿Por qué?
-Bueno…según la información que Anita le saco a la celadora el vino de Inglaterra ¿puedes creerlo? De Inglaterra a parar en este horrible pueblo es demasiado…en fin, por eso dicen que no habla español…
Giselle dirigió su mirada hacia Lucas quien estaba tranquilamente sentado en su banco y con los ojos puestos en la ventana, en ese momento por primera vez sintió empatía, quizá por el gesto de su cara, muy parecido al suyo cuando nadie la estaba mirando, o podría ser por el hecho de que la costumbre de apartar ciertos pensamientos en la imagen inmóvil de la ventana era algo tan propio de ella que se le hacia raro verlo reflejado en alguien mas.
Lucas por otro lado permanecía inmutable, ajeno a las miradas que no dejaban de posarse en el, sin embargo una voz interrumpió su tranquilidad.
-Lucas…¿verdad?-dijo un muchacho acercándose-
-Si…-respondió perezosamente y sin quitar la mirada de la ventana-
-Hablas español?
-Si…
-Lo sabia! Todos estos idiotas decían que no hablabas español pero eso es imposible ¿verdad? Porque no vendrías a este país sin saber hablar su idioma ¿no es así? Lo sabia, lo sabia ¡y todos ustedes son unos idiotas por no darse cuenta de algo tan simple!-grito-
-Ya cállate! Estamos tratando de hablar por acá ¿sabes?-reprocho Lizet-
Pero el muchacho la ignoro y se giro nuevamente hacia Lucas.
-Me llamo Javier!-se presento con entusiasmo- es un honor ser tu primer amigo Lucas…
Al escucharlo lentamente se volteo a verlo. Este chico era muy alto, quizá unos centímetros más que el, tenia el cabello corto y negro, sus ojos eran de un marrón obscuro y su cara estaba repleta de unas cuantas pecas.
“…”Lo miro como esperando escuchar el motivo de su molesta presencia pero el alegre muchacho en vez de alejarse tomo asiento a su lado e inicio una charla.
-Así que eres de Inglaterra ¿he? Dime que hace a una persona que vive en un lugar tan fantástico como ese venirse a un pueblo tan miserable como este?
-Problemas personales…, supongo-murmuro en un tono muy bajo pero aun así Javier logro escucharlo-
-Si? Ja que ironía-rio sin ganas- cuantos de nosotros daríamos todo por irnos y olvidarnos de este detestable pueblo…
Por un momento el tono de su voz se volvió amargo pero casi al instante cambio de nuevo a su extraña alegría.
-Bien! Ya que eres nuevo esta tarde después del colegio vamos a dar una vuelta por el pueblo ¡voy a llevarte a los mejores lugares que hay por aquí!
“este chico…” pensó Lucas observándolo detenidamente, su sonrisa se extendía entre sus dos hoyuelos mientras le hablaba de una manera tan familiar aunque apenas se habían conocido. Cuan distinto era a los demás quienes solo se remontaron a mirarlo llenos de desconfianza y se resguardaron entre sus palabras y suposiciones sin siquiera acercarse a preguntar primero, sin duda era diferente a ellos ya que el en verdad parecía sonreírle sinceramente…
Sin pedir su permiso Javier trajo una mesa y un banco y los ubico al lado de donde estaba Lucas.
-Ha partir de hoy me sentare a tu lado todos los días!-anuncio en voz alta-
Los demás le dedicaron una mirada llena de molestia lo que a el le resbalo como si estuviera cubierto jabón.
Al ver su rara actitud ante la incomoda situación se dibujo una leve sonrisa en la cara de Lucas "este chico...me agrada..."
El sol de la tarde callo hasta ocultarse del todo y Giselle se encontraba apenas regresando a casa, ya había pasado mas de una hora desde que salió del colegio, realmente no tenía en cuenta lo rápido que avanzaban los minutos cuando iba a tomar la merienda en casa de Ana y es que entre charla y charla la noche llegaba sin que se dieran cuenta.
Arrastrando los pies por la pereza caminaba a paso lento y entre bostezos se cubría el cuerpo con los brazos.
-Hace frio-murmuro quejándose del fresco viento que corría en la placita, entonces se detuvo justo a la mitad del parquizado prado verde dejando que su cabello se desordenara por la constante brisa. Lo que llamo su atención fue un animal de pelo negro y resaltantes ojos amarillos, un gato, que se cruzo en su camino…
A ella le encantaban los gatos a tal punto que era su animal favorito. Se agacho sobre sus piernas y extendió la mano hasta el pero este se alejó corriendo y se detuvo delante de los enormes portones de rejas gruesas que rodeaban la casa de Lucas. Ignorando la imponente casa que antes tanto le gustaba, se acercó nuevamente al arisco gato negro quien se volvió a escapar subiéndose a un árbol, desde allí la vio poner esa cara desconcertada y algo decepcionada mientras se daba vuelta para continuar con su camino. Entrecerró los ojos y en sus pequeñas pupilas amarillas se reflejaba ese delgado cuerpo caminar a un paso, esta vez, mas apresurado…
Lucy29 de abril de 2012-
Lucy
No se que pasa!!!! publikeee como tres veces este texto y se borra :s y cuando quiero leer los comentarios se mezclan !no se si mi internet anda mal o q pasa!! buenoo espero que ahora este bienn :) jejje
29/04/12 12:04
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Davidlg
luuuuuuuuucy =S ya aparecio bien jejeje al menos hasta ahorita!
29/04/12 12:04
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Lucy
Bien!!! espero que se mantenga asi...!!!! y que no se me borre otro texto (ya hoy se me borraron dos) :s
29/04/12 12:04
