La suavidad nos aleja de su mundo, pero consigues que siga ahó, cercano a una poesía que fluye. Un misterioso ejercicio que sostiene el sentido del poema, como si fuera tejido con alas de mariposa. Es un placer leer tu alquimia. Un gran saludo y mi admiración.
Niña Blanca!!!:) El aire, a veces, puede ser un arma de doble filo. Pero, puedes aspirarlo, cerrando tus ojos, y poniendo ambas manos en tu corazón. Si Sientes tus Latidos! Entonces, el Aire, es Vida! Saludos!!!!