ansío que vivas
en el adiós a la tristeza
en otra mirada del mundo
en una brevedad de pétalos
en la madera de los violines
en el silencio que puedas
procuro que vivas
en esas cosas que no tienen nombre
en la incumbencia del asombro
en los ojos que han llovido
en la verdad que siente su paisaje
en el tiempo que es lo de menos
acaricio que vivas
en la vaporosa canción de nuestros días
donde una vez y siempre
-en la memoria y en el hoy-
sobra toda palabra
y es de amor y besos
El texto tiene musicalidad. Me gusta la madera de los violines.
Saludos Luia.