Diario, O Lo que Digo que
Hago... (y Va a Ser que No)
Inspirarse para hacer un diario es tarea harto dificultosa, y si no que me lo digan a mí, que he decidido dejar de fumar, alistarme al movimiento freaky del deporte es salud y hacer dieta todo de vez.
Desde el día 01/01/2013 vivo sin vivir en mí. Es cierto, no adubo a anotar todas las sensaciones que tengo, que a la postre se reducen a:
- Tener hambre todo el día
- Estar jodida de dolores y contracturas
- Comerme hasta las uñas de los pies de puritita ansiedad.
Una persona inteligente, habría hecho las cosas una tras otra, pero como yo soy de hacer muchos planes...( y luego como dice el refrán que el que mucho abarca poco aprieta), pues así me va.
Ya se ve que la inteligencia es un don que olvidaron incluir en mi pack de nacimiento. La verdad... es que no pasé de ser una mocosa llorona, con el sueño cambiado y malas ideas hasta en las arrugas de las sábanas de la cuna.
Bueno pues el año como es natural en mí, empieza con gripazo, sin reyes, sin trabajo, o mejor dicho trabajando by the face (lo que viene a ser por la patilla) y leyendo a los clásicos rusos. (Que para dar ánimos son los mejores. Vamos que no he visto tíos más alegres en mi vida, y cuando no disfrutan se ahorcan o se vuelven majaretas).
Llevo una semana comiendo lechuga y verduras varias (alfalfa seca, que son esos putos cereales integrales de avena, que eso dicen..., pero para mí que son paja seca de los corrales de las naves industriales donde crían las gallinas. Saben a estiércol y se te quedan agarrados entre las muelas de tal forma que no hay cepillo que arranque las dichosas hebras)
Llevo los mismos días intentando correr, (para que me entendáis, me casco un trote-cochinero/caminar) que lo único que me ha hecho ganar además de agujetas ha sido una contractura de puta madre en el muslo que para qué decir ya más.
Y como no (entre deportistear, comer hierba y no fumar), tengo un hambre que me jodo. Pero de perder kilos ni en mis mejores sueños. (Conque no digo más que al final del día arrasó con todas las provisiones de la casa, que si tuviera que escribir todo lo que me hecho al gaznate de extrangis tendría que comprarme 3 agendas de folio y no sé yo si haría corto).
Empezaremos a escribir mis sensaciones otro día, que ahora mismo me estoy atragantando con los polvorones que tengo escondidos debajo del mueble del comedor. Sólo espero que no me llamen por que si no ... No sé... (Jodido para responder o para tragar estilo ganso).
Pero como además soy una zopenca de tomo y lomo y no me sé estar callada... (no se me ha ocurrido otra idea que la de hacer participes a toda la familia de mis propuestas serias para el año... Mi marido me vigila, lo sé, lo noto), estoy escribiendo y poniendo la oreja y ya estoy medio azul.
Ay, amiga, todos nos hacemos propósitos a principios de año que no seguimos ni de lejos. A mi al menos nadie me vigila, será que tampoco le importo a nadie. Un beso y mucho ánimo. Las flacas no tienen donde agarrar
