Una nota de alegría,
siempre fue así.
Nunca debí confiar en palabras mudas.
Maldita mente hueca, llena de canciones sin vocales.
Solo son cosas sin sentido, nunca tuvo cabida la lógica,
tampoco sabía que buscaba y me perdí en un mar de cables.
Concierto de arcoíris eclipsado por la oscuridad
de una candela mojada con saliva de bocas sin lengua.
Todo vuelve a tener el color de una hoja de papel vacía.
La carga vence al lado que más le pesa.
Las preguntas caen a cámara lenta
y se pierden como pompas de jabón
en un suelo de inseguridades y olvido enmascarado.
El pesimismo juega con migo a disfrazarse de ilusiones.
El camino es extraño y cuesta llegar a un final.
Mis uñas no saben arañar evidencias.
Una chaqueta no me quita el frio.
El fuego no resiste mi gelidez, se extingue llorando metralla.
Me culpan por mi ausencia,
y nadie quiere entender que mis ojos temen ver.
El pájaro vuela hacia donde lo lleva el viento,
sus alas están rotas.
Los puntos cardinales se hicieron uno solo.
Llega a ningún lugar
Los suspiros se amontonan donde se pierde la vista.
Se hace la hora de que corte conexión entre mente y mano,
el bolígrafo me mira con expresión interrogante,
no me reconoce.
![](http://img718.imageshack.us/img718/5421/sephirothjenovahead.jpg)
Pensamientos sueltos, fragmentos de una misma esfera de poder corrosivo.