El sol brilla fuertemente,
el olor a primavera ha llegado
las rosas endulzan el ambiente
por el que tu pelo ha pasado.

Con alegría y agrado
entras en tu colorido jardín
y ves que tu flor no ha nacido,
esa flor de color carmín.

Con la sonrrisa apagada
miras hacia el cielo
y con la ilusión gastada
imaginas la rosa al vuelo.

Vuelves a tu linda casa
y ves sobre la lámpara
a una blanca mariposa,
que está para admirarla.

Te levantas de la butaca
y sales a toda prisa
a por tu cámara fotográfica
puesta en la repisa.

Cuando llegas ya ha marchado,
no te podía esperar,
la suave brisa se la ha llevado
y no se podía quedar.

Te acuestas al anochecer,
sin sueño miras por la ventana
y ves algo resplandecer,
parece una luz divina.

Sales a la calle corriendo
con mucha curiosidad,
no sabes lo que esta ocurriendo
podría ser una gran maldad.

Del jardín sale el resplandor,
miras con mucha atención;
la luz se vuelve de un inteso color
que acelera tu respiración.

Aacaricias la luz con bondad
pues se trata de tu bella flor
que luce en la oscuridad
por temor de ver el sol.

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3 Comentarios

• 

  Mary

  Esta poesia la hice hace algunos años y como la poesia no es lo mio... pues no es gran cosa...

  06/03/10 10:03

• 

  Elnovelistadeoro

  Tranquila tu poesia, es un pasaje limpio y tranquilo, eso dice mucho de ti.
  
  Hasta pronto.

  08/03/10 07:03

• 

  Mary

  Un gusto vert por aqui novelistadeoro .Gracias por leer mis
  escritos. Muchos besos.

  08/03/10 08:03