Mefisto yo te veo, como sin miedos, como que tú mismo te curaste de este mal que acecha tras las cortinas de la mente. Buena entrega, como siempre Mefisto, un gran saludo.
No sientas asco, todo el mundo tiene miedo. Que podríamos enfrentarlo, pero no es tan fácil. Pero tú decides.
Tienes razón, el miedo paraliza y retarda nuestro avanzar, nos perdemos de mucho en la vida cuando no lo podemos controlar, es la primer frontera que tenemos que atravesar para alcanzar lo que deseamos.
Me alegra que te guste el texto, gracias por tomarte el tiempo de leer y comentar, LuisJose.
Los miedos siempre nos acompañan, es cierto hoy tengo menos miedos que cuando escribí esto, hay temores que aunque mates vuelven como fantasmas para fastidiar, claro hoy ya no influyen tanto.
Un gran saludo igualmente Regina.
De hecho sentía asco, porque nunca fui lo suficientemente valiente para afrontar mis miedos, a pesar de ser consciente de sus causas y consecuencias. Pero a pasado el tiempo suficiente para evolucionar mi pensamiento, hoy soy indiferente a la mayoría de temores y más consciente de que entender algo no sirve de nada si no estas dispuesto a cambiarlo. Claro uno decide como afrontar los miedos y por experiencia sé que se es más feliz al someterlos.
Gracias, pues al leer tu último escrito, recordé este texto que escribí hace tanto. Saludos Olivia.
Me gustó! El miedo paraliza y retarda mucho nuestro avanzar, amigo ... Es un mal consejero y engaña nuestro futuro ... Me gustó mucho tu texto como de modo confesional ! Abrazos!!!
Luisjo