Sólo existe aire con tus pasos, se entorpecen los demás, despiertas alegría y sueños, ¿a donde me quieres llevar?
Llévame a un país de ensueño, de esos k no existen en la realidad, en el que la pena sea gloria y no haya injusticias jamas.
Llévame hacia un lugar en el que la libertad sea un principio no algo por lo que luchar, muéstrame el camino hacia la igualdad, donde la intolerancia sea irreal.
Camina hasta el infinito de mi mano, tal vez te lo pueda mostrar, parajes escondidos tras las nubes y sólo llueve luz al final.
Camina de mi mano, idealista, ese lugar no lo podras encontrar, sino es en tus sueños o hallando la muerte eterna.
¿No oyes los llantos ajenos? No los quiero escuchar, transformarlos en cánticos de sirena para que me pueda ahogar, permanecer en el agua y olvidar las quejas y penas de este mundo infernal.
