La nada no existe. Y menos ,cuando la relacionan con el amor,muchos intentan inundar, con el desabrido mar de la nada, un sentimiento que siempre lo tuvo todo: color, aroma, sabor, continente, pasión, deseo, contención. Éste último, sobre todo.
En el amor, si es real, hasta se puede sentir, temblando de mística dicha, como frente a una celestial aparición, que se a visto a Dios.
Es como si encontraramos el aleph. El punto que encierra todo. Ese punto del cual tanto hablaba Borges.
Dios existe, y está en todas partes.
El amor es como Dios en la vida de las personas...
Lo sufrimos cuando lo perdemos y en ocasiones, hasta cuando lo encontramos.
A veces, es el lecho frío de un río, por nuestra culpa. Por no adorarlo lo suficiente.
Pero casi siempre es una torrente hirviendo, si le rezamos como se merece.
Dios nos alimenta y nos da el alma...aún antes de nacer. Y nos tiene infinita paciencia, de chicos y hasta cuando somos adultos.
Está lleno de luz. Dios no solo es blanco o negro...es de colores y se perfuma con todos los aromas; desde el de las vivas flores de un entierro, hasta el de la hojarasca húmeda, ardiendo en un bosque otoñal.
Muchos han matado y han muerto invocando su nombre. Otros lo han asesinado, usando como disculpa el hecho de amarlo.
El amor, es sinónimo de Dios...
Dios es amor.
Un tema muy comprometido el tuyo Movisi.
Pero el texto, es sumamente hermoso.
Yo tecreo.