Estoy hasta los ovarios, hasta los mismísimos ovarios de sufrir por amor, de no ser correspondida, de tener miedo y hacer que ese miedo me quite momentos inolvidables. Que tengo ganas de decirte que te quiero, de decirte que si no crees en el amor, yo te haré creer en él, de quitarte las ganas de irte lejos, ganas de que te quedes aquí conmigo, descubriendo mundos, viviendo experiencias, siendo felices.
Pero no puedo, mi miedo me supera, es mi mayor debilidad, miedo por ser rechazada, miedo al qué dirán, miedo a ser decepcionada, miedo a perder amistades, miedo a la soledad; millones de miedos me oprimen, hacen que deje de hacer cosas que me gustaría mucho, hace que me guarde muchas cosas que me duelen. Y quiero cambiarlo, quiero ser libre, libre de los miedos, quiero decirte que te quiero, que estamos hechos para estar juntos, que tú y yo, podemos conquistar el mundo si nos lo proponemos, que eres lo mejor que me ha pasado, que si que eres mi mejor amigo, pero eso no impide que podamos ser algo más.
Pero claro, tengo miedo al los cambios.
Quizá ( solo digo quizá), lo que llamás miedo, es sentido común de verdad.