La Niña que Comió Muchos
Frijoles!!!
01 de marzo de 2009
por nigth14
Ella de repente, se despertó y se dio cuenta que su cama y que sus sueños no eran nada normal.
Era la década de 1938, el sol era totalmente titilante, y sus rayos penetraban las aceras empedradas en donde circulaban miles de carretas y carros nuevos, parecidos a escarabajos negros que se movían incesantes entre la jungla de faroles de hierro y de vestidos corpulentos que hacían ver a las mujeres a aquellas muñecas de porcelana, tan frágiles como un hilacho de oro y tan sutil como un hilacho de saliva.
- señora Elizabet debe ver esto urgentemente (exclamaba una mujer negra, que llevaba un vestido blanco rasgado, que dejaba verle los hombros; su cara de asombro resaltaba completamente con el turbante blanco que llevaba).
Había entrado corriendo a la habitación principal.
Caminaron ella y su patrona sobre las alfombras estampadas y dieron con la habitación de aquella niña.
La pequeña Alicia, estaba sobre el colchón de su cama, totalmente con los ojos abiertos como platos.
- ¡¡¡Por dios!!! Que es esto? (exclamó la mujer)
Era algo totalmente peculiar, grotesco y sin sentido.
Del ombligo de la pobre niña, se erigía un árbol de color verdoso que se retorcía lentamente con hojas totalmente verdes y con frijoles sobre él.
- parece a la historia del niño de los frijoles señora (exclamó la mujer esclava)
Elizabeth quedó sin palabras.
Ese mismo día llegó el cura a ver tan pintoresco enigma
- pero que imagen tan grotesca, y carente de sentido (exclamaba el cura de la región, había entrado a la habitación de la pequeña Alicia).
Todos se persignaron, y murmuraron entre ellos.
- ¿será obra del diablo señor?
- Para mí fue un castigo de Dios, para advertirnos que debemos ir a misa los domingos (exclamó una mujer alta de pelo negro)
- Seguro fue porque no les enseñamos bien a nuestros hijos el padre nuestro (decía otra mujer gorda).
La casa se había convertido en une espectáculo iluso, parecido a los actos de Houdini, miles de comentarios se exclamaban entre los pasillos. Hasta los cuadros que adornaban las paredes, se asomaban entre los marcos a ver aquel espectáculo de la niña con una mata de frijoles en su ombligo.
- ¡¡¡hay que envenenarla!!! (decía el cura), ¡¡¡esta niña está loca!!!
Todos empezaron a murmurar.
- ¿pero por qué he de estar loca?, si yo no tengo la culpa de que esto me haya sucedido (decía la pequeña Alicia, en tono asustado)
- bueno, puede ser verdad
pero hay que buscarle solución
(decía el cura)
- ¡¡¡y la única es matarla!!! (decía una mujer asiática que espiaba desde la ventana).
- No
no me maten
yo sólo comí muchos frijoles
sólo es eso
Todos comenzaron a gritar desesperados.
- pero si ella no es hija del diablo
entonces
¡¡¡ seguro es ella el diablo!!!
Todos exclamaron gritos de asombro.
- ¡¡¡hay que matarla!!! ¡¡¡Ella está loca
!!! (decía la mujer gorda)
La madre de Alicia, no sabía que hacer, así que esa noche, subió al tejado y rezó hasta la 1 y media de la mañana para que a su hija se le quitara la planta. De nada sirvió porque se quedó dormida a la 1 y 15 de la madrugada, así que la mañana del día siguiente se lanzó al río porque pensaba que su hija era la hija del demonio.
Los días fueron transcurriendo, y la euforia del pueblo fue aumentando, miles de personas ahora se apilaban en la puerta de aquella casa magistral, con el fin de tener algo de suerte y ver a la criatura con una planta en su ombligo.
Los bancos, hipotecaron las casas, la gente desesperada comenzó a vender sus enseres, pues pensaban que el diablo había bajado al pueblo y ahora se los llevaría todos.
Los monasterios no dieron a basto, ahora todo el mundo quería ser cura, a ver si así lograban ser liberados de sus pecados, y liberarse del castigo de ver crecer una mata de frijoles en su ombligo.
- ¡¡¡hay que matar a la niña!!!! (exclamaban todo los hombres, que se apilaban en la plaza del pueblo para discutir el famoso caso).
Mientras que Alicia, lloraba desconsoladamente en su cuarto, porque sabía que un día de estos iba a morir por culpa de comer tantos frijoles. Así que comenzó a comer tantos frijoles como pudo (frijoles que colgaban del árbol).
No sabía por que ella lo hacía
sólo le producía placer hacerlo.
Al día siguiente
todo empeoró. Ya no era sólo un tallo de frijol lo que salía de su pequeño ombligo
ahora eran enredaderas que se apilaban sobre las paredes del cuarto
Y muchos, muchos frijoles colgando de él.
Cuando el cura llegó al cuarto al día siguiente, para predicar el padre nuestro
se sorprendió de tal manera, que le dio un infarto fulminante.
La euforia ya no era nada normal
era un caos, una catástrofe. Las personas quemaban sus casas por ningún motivo aparente
sólo había que hacerlo para crear más conmoción.
- ¡¡¡hay que matar a la niña!!!! (exclamaban todos).
Pero nadie era capaz de matarla.
Al cabo de un tiempo, la amenaza de la niña, se había convertido en la sensación del pueblo:
Miles visitaban estas regiones, para ver al fenómeno de los frijoles
Ahora hacían concurso en donde el lema era el que coma más frijoles será el ganador
Y lo peor
es que nunca ganaba nadie
porque había muchos frijoles que comer
Y así llegamos al año 1939, ya las enredaderas habían llegado a todas las casa de la cuadra. La gente seguía tan loca como antes
pero ahora la locura era justificada: ya no había que matar a la niña, sino seguir alimentándola de frijoles, para que así el pueblo tuviera grandes reservas de este grano por los siglos de los siglos.
La locura vehemente, y talmente descontrolada de las cuadras de aquel pueblo, gritaba eufórica entre los rincones de aquellas casas, y es que no había razón aparente de tan infortunio. Sólo una niña comió muchos frijoles
y desde ese día se convirtió en el ser más coherente de aquel retrato salido de una consulta de Sigmund Freud.
A nadie se le había ocurrido que la única solución era cortarle la mata de frijoles a la pequeña Alicia
Había que ser totalmente cuerdo
para no pensarlo.
P.D : este relato es largo lo sé...pero bueno hice más o menos lo que pude para sacarle así sea una sonrisa a este triste mundo :)
a la final...decidí dejarme llevar por la locura de participar en algo...no se que decir jejje
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