En sus ojos de miel,
Tan cálidos y vivos,
Su sonrisa que vale
Todo el tiempo invertido.
Su alma tierna oculta,
Que engañas sin mentir,
Prudente y atrevido,
Cuidando qué decir.
Surfeando a la deriva
Por estabilidad,
Conquistando momentos,
Recuerdos para embotellar.
Su mirada en la tuya
Un cósmico portal,
Que por un segundo conecta
Las ruinas con el mar.
Una esperanza nueva,
Pequeña y encerrada,
Como en las cenizas
Una única brasa.