SIN PÁJAROS NO HAY LIBERTAD











Hiero a las ramas donde me poso
a todas le molesta mi trino
tengo que parar de volar
ser dueño del cielo es amoral,
sí no puedes trinar tú desdén, o la alegría.

Finjo en mi vuelo la libertad
pero en el fondo tiemblo
porque sé que he de formar un nido,
y siendo dueño de otras libertades,
en pájaro de barro me convierto.

Un pájaro de barro cae de la rama
y se funden a la tierra cuando la lluvia lo deshace
el barro es la vida vivida
y los nuevos trinos, la libertad de las verdades


Sin remordimiento, el bosque sigue cantando
un pájaro no hace un bosque, solo el eco de todos
lo convierte, mientras:
lentamente las ramas crecen cerrando los pasos,
los caminos, por ello la libertad vuela y no repta.



Viajo a un mundo en el que no existe otra cosa
que un nuevo trino al amanecer
sin pájaros no hay libertad,
pero los pájaros deben morir,
para que la libertad no quede presa del bosque.


Todas las discordes notas, ¡mi pobre libertad! han de cantarse:
los hombres con el tiempo tergiversan tú sentido,
y aunque las leyes de los hombres, aunque mucho se disfracen,
el egoísmo humano las traiciona.


A causa de la perenne tinta, o de amordazados congojos
borrada eres en tu significado aunque yazcas en el sacrosanto baúl,
eres leída por ojos mortales, en su afonía egoísta y pétrea ,
los que mueren defendiéndote
¡No son sino ideales oscurecidos y dolientes!


Nunca será fácil,
en los presentes aciagos ,
o en los futuros certeros
Sistematizar el orden y el origen de las verdades, y:



que no haya perdedores.