Una lagrima es solo sal,
que surca mejillas cuando resbala
dejando grietas de fuego
sal eterna que quema sangre
dolor que agudiza,
dolor que sale
sal que condena,
sal que acalla
ahogada con medias palabras
que atraganta silencios de indiferencia
escúchale mientras habla
algo te quiere decir.
Sal que apaga fuegos
que se mezcla con tiempo
no le confundas
aun después de inoportuna obscuridad
Sal bendita que muestra colores aun sin poder verlos
Ella es, la que devuelve después fortalezas
La que regresa esperanzas
Es una lágrima.
Yo quiero recoger esa lágrima tuya con el calor de mis mejillas, Rotter.
Te sale por los poros
Te sale por los poros la poesía y tu no te das cuenta.
Yo recojo tu lágrima y en copa de licor me la conservo como el mejor elixir que parieron los tiempos.
Eres un grandísimo poeta.