Una madre llora, su hijo no alcanzará a llegar,
solo un puñado de maiz con un vaso de agua con todo un desierto que cruzar.
Al final está la esperanza.
Su hijo la mira con ojos lánguidos por que sabe que es su fin, ya no quiere comer y su garganta seca no lo deja beber.
La esperanza está al final de desierto.
Quiere descansar para acunar a su hijo.
El sol está fuerte, su cuerpo pide el agua que atesora. Pero... ¿Qué pasaría si muere ella antes que él?
Entonces come los ultimos granos y bebe la mitad del vaso. Tiene que estar fuerte, ella es lo único que le queda, a lo menos amamantarlo de sus pechos secos puede alivianar su dolor.
No te mueras - le dice - No duermas, te cantaré el canto de la abuela de cuándo el águila era amiga de la serpiente y el agua bendecía la tierra -
La esperanza aguarda al final del desierto y no mira sus pies ensangrentados, sólo observa a su bebé que yace en sus brazos apagando su luz lentamente.








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2 Comentarios

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  Cimoni

  Que trsite...he leìdo mucho sobre ese tema y me da una enorme tristeza...imagino el dolor de esa madre con el hambre y su bebé en brazos apagando su vida.
  Triste y ojalá ese sufrimiento no existiera...pero cuando esos otros que tienen poder lucran sin mirar a aquellos humildes e inocentes es que no tienen corazón y solo les importa su bienenstar.
  Ojalá esa esperanza no se enontrara al final del camino y avance hacia ellos a pasos firme para abrazarlos de eso que duele.
  un gusto pasar por tus letras
  Saludos
  

  05/10/11 04:10

• 

  Sexoamor

  Demasiado triste Cimoni, llega a doler el cuerpo pensar en la cruda relidad. Gracias por tu apoyo y es importante elevar conciencias.
  Un abrazo

  06/10/11 02:10